Muchos de nosotros queremos cambiar nuestra vida, pero pocos estamos dispuestos a hacer una simple serie de ejercicios con regularidad, durante un periodo de tiempo.

Estudié crecimiento personal hace más de 20 años, conocí “toda la teoría”, y, aun así, en el año 2012, me encontré totalmente estancado en un trabajo que ya no tenía sentido. Entonces, me crucé con el ‘Coaching‘.

«El maestro aparece cuando el discípulo está listo», dicen.

En mi formación con IEC, me di cuenta de que de nada sirve la teoría si no la pones en práctica. Era la primera vez en mi vida que contestaba a las preguntas puñeteras que todos nos hacemos pero no resolvemos porque es más cómodo ir a otra cosa —por ejemplo, buscar fotos de gatitos en Facebook— en vez de contestarlas. También apunté mis objetivos y examiné mis valores y —¡vaya!— todo empezó a cobrar sentido. Más adelante, con mis clientes de ‘coaching’, me daba cuenta de que, al final, lo que estamos haciendo en un proceso de ‘coaching’ es ir cambiando hábitos. Sustituyendo hábitos que no nos apoyen en el camino hacia nuestros objetivos por hábitos que nos acercan cada día un poco más a ellos. De aquí nace el libro. Se trata de hacer pequeñas cosas diariamente hasta que logremos nuestro objetivo. Quiero motivar al lector para que escoja algunos de los muchos ejercicios y se concentre en ellos durante, al menos, 30 días.

Si los haces constantemente, tu vida cambiará. Si ves que te cuesta mucho, haz los ejercicios que no te cuestan. Si te vas saboteando, empieza con los ejercicios que potencian tu autoestima, como apuntar tres cosas positivas que te han pasado cada día, o el hábito de mirarte en el espejo cada día y decirte qué grande eres y que te mereces lo mejor. Pruébalo: a ver cuánto tiempo puede resistir esta vocecita que te dice “¿pero tú quien eres para decir esto?” o cuánto tiempo necesitas tú para contestar “¿y quién soy para no merecerlo? ¡Claro que sí que me lo merezco!”.

No importa lo que te hayan dicho durante toda tu vida. ¡TE MERECES LO MEJOR! Y TÚ estás al mando. ¡Cuanto antes te das cuenta, mejor! Lee te el post de David Cru. Mejor, no se puede explicar. Y el poema de Walt Disney, ¡echado de un periódico por falta de imaginación! Algo de caso habrá que hacerle al hombre. Al final es simple —no fácil, pero simple. Si estás apuntado a un gimnasio desde hace seis meses y no vas, quizá el gimnasio no es para ti. Empieza a dar paseos o juega al pádel, o lo que sea. Levantarte a las seis de la mañana e ir a correr es un hábito, y desactivar la alarma y seguir durmiendo también lo es. Estar contento con la persona que eres o machacarte por alguna cosa que no has logrado también son hábitos.

¿Cuál eliges? Todo lo que tienes en tu vida hoy es un resultado directo de los pensamientos, creencias y expectativas que forman tus hábitos. ¡También lo es dónde estarás en uno, cinco o diez años! Nada pasa «porque sí».

Con mi libro (lo puedes bajar en www.amazon.es/dp/B00N2GDB0K te quiero ayudar a encontrar la manera de tomar el control y la responsabilidad total de tu vida. Con un par de pequeños pasos cada día, puedes cambiarlo todo. Pero ¡ojo!: “30 DAYS” no es, sólo, un libro para leer; para que funcione, hay que trabajar: hacer algunos de los ejercicios que propone constantemente durante un tiempo. Una de las frases que me marcaba más en los últimos años es aquella en la que Albert Einstein definió la forma más pura de la locura como «hacer las mismas cosas una y otra vez, esperando un resultado diferente». Si quieres cambiar tu vida, tienes que cambiar tus hábitos y empezar a hacer cosas pequeñas de manera diferente cada día. ¡El cambio comienza contigo! ¡Adelante!

Post escrito por Marc Reklau, exalumno de IEC. Life & Executive Coach / Author of «30 DAYS»